Cara de cuero

Intérpretes: Juan Orellana y Vanessa Guerra
Versión y dirección de Sebastián Moreno, a partir de la obra original de Helmut Krausser.
Sábados de enero en la Sala La Usina, Madrid.

Un hombre admira las peliculas violentas, especialmente The Texas Chainsaw Masacree, más allá de lo que parece juicioso. Además, cuando aparece su novia nos parece un machista maltratador... En una especie de juego de muñecas rusas que vamos descubriendo, esta historia contiene otras historias y los interrogantes empiezan a pasar por nuestras cabezas uno tras otro.  La tragedia se masca desde el primer momento pero los golpes de efecto, los turning point se sucederán de un modo imprevisto. Nada es lo que parece.

En 1987, la policía de Munich acribilló a un joven actor fascinado por el personaje Leatherface de la matanza de Tejas y estaba preparando una performance sobre el mismo. Había levantado sospechas en los ensayos y por su comportamiento, con lo cual decidieron intervenir para proteger a su novia. Con este reality bite, el autor alemán Helmut Krausser escribe su primer texto teatral que llega a buen puerto, ya que según parece había destruido más de 20  trabajos anteriores de los que no se sentía completamente satisfecho.

Sebastián Moreno y sus magníficos actores nos proponen una desadaptación/reescritura del texto, centrándose más en la historia interior de la pareja que en la crítica radical al estado policial del original, con cierta influencia del propio cine y las peliculas que admira el protagonista, así como las referencias culturales inevitables en un director de su tiempo. Huele y transpira al mejor Almodóvar (La ley del Deseo, por ejemplo).

La interpretaciones nos ayudan a hacer la travesía por ese laberinto de emociones, dolorosas, contradictorias. Ni un sólo momento de tranquilidad nos aguarda en esta representación, por lo que debemos felicitar a todo el equipo por un muy buen trabajo, muy logrado, que contiene el pulso y la tensión que creo que le querían dar en todo momento.