Eva ha muerto (4ª temporada)

Foto: David Semurat

Escrita y dirigida por César Augusto Cair
Con Iván Hermes
Nave 73, Madrid

Las circunstancias (una de ellas, su gran calidad) han hecho que tengamos la oportunidad de ver este trabajo crecer desde que lo vimos hace un año y medio. Es una experiencia poco frecuente para el público, que bien ve una obra determinada una sóla vez, o bien si la ve más de una vez es con otra producción, otro director... Nos pensábamos que aquí solamente se había sustituido al actor, pero el cambio va mucho más allá.

César Augusto Cair le ha dado una vuelta a la puesta en escena, seguramente por las necesidades de la nueva sala, algo más grande, pero ha aprovechado ese replanteamiento para darle un poco más de dimensión, de densidad a este Adán. A ello contribuye, como no, Iván Hermes, en uno de los trabajos más potentes que hemos visto últimamente, con un físico muy contundente, muy salvaje y diferente de los adanes anteriores. Lo tienen que ver.

Foto: David Semurat

Como es natural, también hay una (pequeña por suerte, ya que el relato que habíamos visto sigue siendo bellísimo e inspiradísimo) reescritura del texto original. Lo decía hace unos días Alberto Conejero: el teatro es un género que se reescribe constantemente: pueden intervenir los autores de la versión, los intérpretes... ¿cómo no va a intervenir el propio autor? También se ha adaptado la escenografía, que se olvida de telas y hojas (por lo que recuerdo) para hundirse en la tierra y el lodo. 

Como decíamos, es una experiencia emocionante ser partícipe de esta madurez, no ya de un autor, sino también de un texto. Merece ser conocido por el gran público.