Afterglow

De S. Asher Gelman.

Traducción y adaptación de Carlos Martín y Diego Rebollo.

Con Andrés Acevedo, Christian Escuredo y Jorge Vidal.

Dirigida por Pedro Casas.

Nave 73, Madrid.

No es de extrañar que este trabajo ya tenga las localidades vendidas desde hace semanas y seguro que tendrán que prorrogar. Las funciones en la Nave 73 son siempre muy especiales, miman al público y a sus producciones. En esta ocasión ha habido un crowdfunding detrás que ha hecho posible traer esta obra desde Broadway con una dignidad y un nivel impecables. Las interpretaciones y el texto también son memorables, como paso a explicar.

Un matrimonio que está esperando un hijo por gestación subrogada también conforman una pareja abierta en la que los trios y las relaciones aparte están admitidas. Pero van a conocer a un chico muy especial, que va a cambiar sus vidas.

Unos personajes terriblemente contemporáneos, que lo quieren todo y de calidad y  no quieren renunciar a nada. ¿Es posible ser padres y mantener un estilo de vida de jóvenes? ¿Cuales son las ventajas y desventajas del tipo de relación que tienen?

Los tres actorazos lo dan todo, empezando por su propia intimidad, con lo que ya desde el primer momento nos acercamos a sus protagonistas y compartimos sus sentimientos. Reconocemos muy bien los personajes, en un texto muy bien escrito y, por qué no decirlo, muy bien traído a nuestro idioma, con un español muy natural. 

El público aplaude a rabiar al final.