La vida es sueño

de Pedro Calderón de la Barca, versionado por Virtudes Serrano

Con Juan Luis Acevedo, Daniel Alonso, María Fontanals, Fernando Gazzaniga, Catherine Núñez, Jerry Soto y Eva Cristina Vasquez

Dirigida por Mariano de Paco Serrano

Monasterio Cisterciense de San Bernardo, Alcalá de Henares.

Ha sido una lástima que el esplendor de este festival de teatro clásico, quizá una de las mejores ediciones que hemos visto, se desluzca con este trabajo tan poco respetuoso con el público. Se dice a veces que un buen espectáculo crea afición. Pues bien, creo que aquí pasa todo lo contrario. Si había alguien entre el público que no había ido al teatro antes, ya no vuelve más. Si había alguien que no conocía el texto calderoniano, pensaría: "vaya mierda".

No se distinguen los personajes porque van todos tapados cual monjes ninja o mujeres iraníes. Los monólogos (el plato fuerte de la obra calderoniana) ¡se dividen y se recitan entre varios!, también interpretan entre todos todos los papeles y la oscuridad como opción de espacio luminoso contribuye a que dejemos de interesarnos en hacer el esfuerzo de seguir lo que está pasando más pronto que tarde. El resto de la función es sentirse miserable y aburrido.

La disposición escénica, a cuatro lados y rectangular, causa que los lados cortos del cuadrilátero sufran la espalda de los intérpretes y la iluminación en la cara casi todo el espectáculo.

Cabe añadir el lugar especial donde se representó (le llaman a esto un proyecto site-specific) no se justificaba y además proporcionaba mucha incomodidad con sus sillas de chiringuito serie B y el agobiante calor.

Pa' habernos matao. Triste recuerdo dejan este director y esta compañía en Alcalá.